Madrid '17

by - marzo 02, 2018


Es viernes y como va siendo costumbre, toca post.

Hoy os muestro la última escapada que hice el año pasado, esta vez, con mi love Marc.

Tenía ganas de viajar con él, pero como no le hacen mucha gracia los aviones, tuve que buscar una alternativa. Pensé, ¿Por qué no ir a Madrid en AVE? 

Marc ya había viajado en este tren de alta velocidad por trabajo pero yo no, así que también era una buena oportunidad para probarlo.

Así que un mes antes empezamos a organizar la escapada y comprar los billetes y entradas de ocio.


DÍA 1 - Llegada a Madrid


A las 7:40h en punto salió el tren. El trayecto se me pasó super rápido, y eso que la película que pusieron era un drama y optamos por ignorarla y escuchar música.

A las 10:10h, la hora indicada exacta de llegada, ya estábamos en Atocha.
Me sorprendió muchísimo la exactitud horaria de este medio de transporte.

Buscamos la parada de metro e hicimos una increíble cola para poder comprar la tarjeta recargable del metro. (La primera cola de todas las que íbamos a hacer.)

Cogimos la línea 1 (azul claro) en Atocha y 4 paradas más tarde estábamos en Sol para ir a nuestro hotel.


Hotel

Reservamos habitación en el hotel B&B Puerta del Sol 3*, situado en la calle Montera, pegado a la puerta de Sol. Desde nuestra habitación veíamos la plaza.

La habitación nos gustó mucho, era modera y estuvimos muy a gusto.

El cabecero de la cama, tenía la opción de encender luces leds del color deseado alrededor del cabecero y de la ducha.

Nos llamó la atención que la pica estuviese fuera del baño, pero no fue ningún inconveniente y hay otras habitaciones con otra distribución más "normal".

El hotel dispone de este espacio, en el cual puedes encontrar fruta, café, té e infusiones sin coste alguno.
No tienen la opción de desayuno pero puedes acceder a esta sala y al menos tomarte un café.

También te dejan, lo que para nosotros fue una sorpresa, un mini desayuno en la puerta de la habitación todas las mañanas.

Tampoco dispone de restaurante, pero en la puerta hay un restaurante Udon. Puedes hacer el pedido desde la habitación y te lo suben, a demás con un pequeño descuento y luego lo pagas en recepción a la salida.

Nos encantó absolutamente todo de este hotel. Llegamos ante de la hora del check-in y como tenían habitaciones disponibles ya pudimos subir y dejar allí las maletas.

El personal es muy agradable, todo super limpio, es económico para su ubicación. Las habitaciones están muy bien insonorizadas, abrimos la ventana y alucinamos con el jaleo que había en la calle y sin embargo, nosotros no escuchábamos nada. 100% Recomendable


El primer día de mis escapadas, siempre llevo bocadillos para desayunar y comer, así me estreso lo menos posible a la hora de buscar un sitio dónde pueda comer. Así que nos comimos el primer bocata para coger fuerzas para un día de turismo.

Obviamente, empezamos por la Puerta del Sol y curiosamente con un gran sol, pero mucho frío.


Casi muero al toparme de frente con la pastelería "La Mallorquina", un lugar dónde enloquecer dulcemente.


Cogimos la calle Mayor y empezamos a caminar hasta Plaza Mayor, en la cual había un mercado navideño.


También visitamos el Mercado de San Miguel. Me pareció realmente bonito.


Luego seguimos paseando hasta llegar a la calle de Bailén donde está el Palacio Real de Madrid.


Hicimos una paradita en los Jardines de Sabatini.

 (Sí, el agua estaba completamente congelada.)

Nuestra siguiente parada, el templo de Debod.

Como ya es costumbre, mi Lego viajero no se quiso perder tampoco esta escapada.

Sin darnos cuenta, nos vimos en medio de Gran Vía, rodeados de teatros con carteles llamativos. Nos vino genial, ya que así ubicamos el teatro Lope de Vega, ya que a las 20h teníamos entradas para ver el Rey León.

Continuamos subiendo y... ¡Sorpresa! Ahí estaba la Nimbus 2000 de Harry Potter.
Había una larga cola para hacerse la foto, pero no podía dejar escapar la oportunidad de subir en ella.


En Gran Vía todo nos sorprendía, incluso el Primark más grande que he visto nunca compuesto de 4 plantas. Poco tiene que ver con el resto de Primark a los que estoy acostumbrada, todo bastante ordenado y con gran variedad de ropa.


La calle en la que se encuentra situado nuestro hotel conecta Gran Vía con Sol, así que empezamos a bajar hasta llegar a nuestro hotel.

Aprovechamos para ducharnos y ponernos guapos para ir a ver el Rey León.

Supuestamente el espectáculo empezaba a las 20h y se indicaba que podíamos acceder al teatro desde 1h antes del inicio. Pues va a ser que no, llegamos media hora antes e hicimos más de media hora de cola, de la cual no se veía el final. Pero valió la pena.

Compramos las entradas un mes antes. Escogimos la fila 13, justo detrás de la fila butaca oro.
Ya que este evento no tiene entradas baratas, tampoco queríamos comprar las más económicas y no tener una buena visibilidad o no poder disfrutar de todo del espectáculo.

Las entradas nos costaban 93,96€ cada una, pero como tenía un vale atrápalo de 100€ por el anuncio que rodé cuando trabajaba allí, pues lo invertimos en esta compra. Así que en total pagamos 87,92€ por las 2 entradas :)

Totalmente recomendable, la fama que tiene es merecida. Los actores lo hacen perfecto, cantan de maravilla y el vestuario es una pasada.

Cuando salimos del teatro nos sorprendió que todas las luces de navidad estaban ya apagadas. Paramos en un McDonald's a por la cena, yo feliz solo con mis patatas, y ya nos fuimos al hotel. El cansancio podía con nosotros.


DÍA 2


A las 9h de la mañana ya salíamos por la puerta del hotel dirección a la boca del tren de Sol. Que por cierto, es la mejor hora para visitar la Puerta del Sol, casi no hay gente en comparación con la tarde-noche.


Cogimos un tren y bajamos en Nuevos Ministerios, allí hicimos transbordo a la línea 8 (rosa) hasta la parada Feria de Madrid. Esa era nuestra parada, pero aunque el metro paró, las puertas no se abrieron y llegamos hasta el aeropuerto y allí tuvimos que dar la vuelta...

Y por fin, ¡llegó el momento! Allí estábamos... ¡En la exposición de Harry Potter!

Pero mejor os detallo esta visita en el próximo post, ya que si no esta sería la entrada más larga de la historia de blogger.

Cuando salimos de allí, nos fuimos a buscar 2 de las 4 esculturas de Harry Potter que habían colocado por la ciudad.

En la parada de metro de Bilbao línea 8 (marrón), encontramos a Dobby en Glorieta de Bilbao.
Me hizo mucha gracia ver la de calcetines que la gente le había dejado sobre el libro. Todo un detalle, ya que... "¡Dobby es un elfo libre!".


Y como si de una gincana se tratase, nos fuimos en busca del Sombrero seleccionador, situado en la Calle Serrano. Solo tuvimos que subir de nuevo al metro, misma línea 8 y bajar en Colón.


Ya que estábamos allí, descansamos un poco en la Plaza de Colón.


Se acercaba la hora de comer y mi agobio por encontrar un sitio en el que yo pudiese comer a gusto.

Mi amiga Alba me recomendó una taberna llamada "Las Bravas" en Sol, así que para allí que nos fuimos.

Había muchísima cola, pero iba muy rápido, casi no tuvimos que esperar nada.
Nos sentaron y nos atendieron de maravilla, fueron super atentos en el momento que comenté mis intolerancias.

Alba, me había recomendado la tortilla de patatas, siempre me decía que era la mejor que había probado. Así que Marc se pidió la tortilla de patatas con salsa brava y yo solo la tortilla de patatas sin más.


No pudimos salir más contentos de allí, todo buenísimo, rapideza, atención inmejorable por parte del personal y precio razonable.

Yo no suelo comer mucho, así que con media tortilla ya estaba hinchadísima y me pusieron la otra mitad para llevar.

Como estábamos cerca del hotel, Marc se quedó haciendo cola (que no era poca) en la administración de lotería de la Manolita y yo me fui al hotel a dejar la tortilla en la nevera.

Cuando por fin Marc consiguió hacerse con un número de la lotería, nos fuimos directos al Templo de Debod. Sí, otra vez. Es que quería verlo y hacer las fotos al atardecer.

Mientras esperábamos allí a que cayese el sol, no sabíamos que hacer para no morir congelados.


Y por fin esos colores mágicos en el cielo. ¡Precioso!


Me hubiese gustado verlo con las luces encendidas, pero hacía demasiado frío para esperar y también queríamos subir al Corte Inglés de Callao.


Nuestra siguiente parada era el Cortylandia para ver el cuento de invierno, ¡¡pero qué ilusos!!

Cuando por fin conseguimos llegar, me di cuenta que estaba justo debajo del espectáculo y que era imposible salir de allí, estaba abarrotado de gente. Así que volvimos a entrar en el Corte Inglés y salimos por la otra puerta.

Cuando salimos de allí, estábamos super cerca del hotel, pues tuvimos que dar toda la vuelta porque la calle peatonal era solo de subida y la policía te impedía bajar. Absurdo.

Pero al final conseguimos llegar a la Puerta del Sol y ver encendido su gigantesco árbol navideño.

-Curiosidad-

¿Os habéis fijado en el cambio de la decoración en los balcones de Puerta del Sol?


Estas fotos son de algunas calles de Madrid y la última de nuestra vista desde la habitación del hotel.



DÍA 3

El último día nos levantamos con la calma, sin prisas y de nuevo con el desayuno en la puerta.

Nos abrigamos bien y cogimos el metro línea 2 (roja) hasta la parada del Retiro.

En la puerta del Parque del Retiro y en frente de la Puerta de Alcalá, se encontraba la última escultura de Harry Potter que nos faltaba, el Ford Anglia volador.


Tengo un amigo (Jorge), que vive por la zona, así que le escribí para que me recomendara dónde comer y... ¡acabamos comiendo tortilla de patatas otra vez! Esta vez, en La Clueca.

No estaban tan buenas como las del día anterior pero tampoco estaban mal y tenían mucha variedad.


Después de comer, de nuevo estaba haciendo cola, esta vez para poder posar delante de la Puerta de Alcalá. La gente es muy mal educada y no respetan ni siquiera una cola.


Bajamos por la Calle de Alcalá hasta la fuente de la Cibeles.


Volvimos de nuevo a Sol y como todavía nos quedaba tiempo antes de que saliese el AVE, paseamos tranquilamente por los alrededores, compramos los souvenirs y acabamos en una cafetería porque ya no sabíamos que más hacer.


Finalmente acabamos en la Apple Store y aproveché para cambiar el protector de pantalla del móvil que lo tenía desquebrajado por todos lados.

Después ya nos fuimos para la estación de tren de Atocha. La verdad que impresiona ver esa mini selva dentro de una estación y ver la cantidad de tortugas gigantes que habitan ahí.


Una vez más me quedé sin palabras con la exactitud horaria del AVE.

Salimos a las 21:25h y a las 23:55h ya estábamos en Barcelona, en estació de Sants. Ahí se encontraban mis padres que nos vinieron a recoger.

Nos dejaron en casa y como ya es habitual a la vuelta de un viaje, cogimos nuestro coche y nos fuimos al McAuto.


Esta fue mi segunda vez en Madrid, la primera fue en 2001 con mis padres, que nos llevaron a mi hermano y a mi dos días a la Warner Bross y otros dos días de turismo. Guardaba muy buenos recuerdos y me ha gustado volver esta vez con Marc.

Aunque no hayamos hecho mucho turismo porque no era nuestro principal objetivo, me ha gustado callejear por el centro en navidad.

Por cierto... Todavía no lo había comentado en este blog, pero soy una loca de las tazas y estas son las que me traje de Madrid.




¿Habéis estado en Madrid o vivís en la Capital?
¿Que os parece esta ciudad?



¡Nos leemos en el próximo post!


Marta

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4 comentarios

  1. ¡Ohh, me encanta y espero con muchas ganas el siguiente post de la exposición de Harry Potter! ;) Yo me quedé sin poder ver las estatuas en la calle, porque cuando fui ya las habían quitado, pero me lo pasé como una enana en la exposición. :)

    Vale, un año más tarde me entero de que lo que había en la entrada del corte inglés era el espectáculo de Cortylandia jajajaj, cuando fui el año pasado con mi novio coincidió que pensamos en ir a merendar un chocolate con churros a San Ginés y ¡casi no podíamos pasar de la gente que había!

    Por otro lado, el Templo Debob me parece precioso, creo que es una de las mejores vistas de Madrid para el atardecer... Eso sí, tomo nota de la terraza del Corte Inglés de Callao, porque esa vista no la tenía fichada ¡y también es preciosa!

    Un abrazo Marta :)

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  2. ¡Qué escapada tan bonica! Y el hotel parece precioso, ¡es todo un detalle que dejen un minidesayuno en la puerta! <3 No he estado nunca en Madrid más que de paso, ¡y eso que lo tengo más o menos cerca! A ver si este año le pongo remedio... porque me han encantado las fotos (especialmente el parque del Retiro y el Templo de Debod al atardecer) *-* Ya de paso, también me gustaría aprovechar si hago un viajecito para ver El Rey León. Las entradas son caras, sí, ¡pero creo que merecerá la pena!

    ¡Un besazo Marta!

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  3. Jo, qué viaje express tan bonito! Me ha gustado mucho ver Madrid contigo, yo lo tengo a 40 minutos en autobus desde donde vivo así que todo lo que has comentido lo tengo revisto, pero siempre es muy guay verlo a través de los ojos de otras personas.

    La exposición de Harry Potter me gustó muchísimo así que espero su entrada con ansias. Y el musical de El Rey León es una pasada, lo vi hace varios años y pufff aún recuerdo como se me saltaron las lágrimas de la emoción nada más acabar la canción del principio. BRRRR... *escalofrío*

    El hotel me ha parecido muy guay! Os han cuidado muy muy bien :)

    ¡Un abrazooo!

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  4. ¡Qué escapada más genial! Yo ya he estado cinco veces en Madrid, una de ellas para ver El Rey León. ¡ES MARAVILLOSO! Me ha gustado mucho conocer vuestra pequeña aventura y ver tus fotos (preciosas, por cierto) de una Madrid más navideña a la que no estoy acostumbrada. ¡Un besito!

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